Hoy he recordado cuando, en verano, por seguir un impulso, decepcioné a las dos mujeres más importantes de mi vida, haciendo algo que heriría a la tercera mujer más importante de mi vida si se enterara.
Pocas personas conocen este impulso y, por tanto, pocos lo entenderán del todo, por no decir un número reducido de personas. Pero, lo que quería decir con esto es que hay veces en las que los impulsos nos llevan directamente a hacer daño a las personas que más nos importan...
Pero, ¿somos capaces de pararlos? Yo preferí arrepentirme de algo que había hecho antes que arrepentirme de algo que no haría. Es una paranoia, lo sé, pero bueno, yo creo que la vida no se cuenta en los segundos que respiras, si no en los momentos que te dejan sin respiración.
Sólo quiero decir que, si volviera allí, en ese momento, me equivocaría otra vez.
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