No es un adiós, es el comienzo de algo nuevo

Hace tiempo que quería escribir mi despedida de Sangre, pero entre unas cosas y otras no he tenido tiempo, pero bueno, por ahí dicen que mejor tarde que nunca.

Dos fechas importantes; el 24 de mayo de 2013 y el 17 de enero de 2014, entre las que hubieron numerosas fechas más en distintas partes de la isla, la sangre corrió y corrió sin descanso.

Me dicen que se acuerdan de esa chica tímida que entró y a la que ni se le oía y que ahora hasta grita... Sepan que yo también me acuerdo de ella, y me ha gustado verme crecer al lado de ustedes.

Sangre ha significado muchísimas cosas para mí, al igual que Apeiron. Ha significado el proceso de algo nuevo, el cambio, el descubrimiento de mí misma y de un grupo fabuloso de personas.

Puede que suene a utópico, pero la verdad es que nunca he conocido un grupo como el nuestro porque, al fin y al cabo, como dijeron una vez ''somos un grupo de amigos que hacen teatro'' y eso hace que todo esto sea mucho más grande.

Y bueno, ahora querría dedicar unas palabras a cada uno de los personajes y actores de Sangre, por todo lo que me han aportado a lo largo de este año y por todo lo que he aprendido junto a ellos.

Señorita Ramer... ¡¡Ramírez!!, creo que es conveniente que comience con usted, ya que con usted comenzó todo. Recuerdo ese día en el que me dijeron si quería ese papel, y recuerdo cómo salimos fuera y nos lo aprendimos en un par de veces, cuando yo aún pinchaba a Misha a puñetazos (tú sabes jaja).

Palo, ha sido un verdadero placer compartir escena contigo, las risas, los momentos, los consejos, sabes de sobra que me has enseñado muchísimo tanto dentro como fuera del escenario y que te has convertido en una persona imprescindible en mi vida, ya sabes; ''Un abrazo, y al carajo'' (Con cariño, ¿eh?).

Mi queridísimo profesor, siento mucho la muerte de su gata, pensé que sólo era un sedante... Es usted un profesor excelente, sensible y lleno de matices (un poco borrachín oye, pero se le respeta). Con respecto a usted, sólo me queda decir que: Brindo por el departamento de disección de la universidad, por las pastas voladoras, por los profesores que van a clase con botella de vino y sin vaso y por los que se van de la clase dejando su maletín en el centro de todo...

Señor Arcas, es usted una gran persona y un pedazo de actor como la copa de un pino. Me ha encantado compartir escenario contigo, gracias por este gran año, por todo lo que me has enseñado, por conseguir hacerme enfadar como nadie sabe hacerlo (desde el cariño, ¿eh?). Espero poder seguir compartiendo momentos contigo.

Llega el momento de hablar de la protagonista de mi escena favorita de la obra. No... No me refiero a Berta-Goyita, que también hace muy bien su papel de estar ahí sentada callada, si no al de esa maestra de infantil con tantos sueños frustrados, esa que calla tantas cosas y que acaba explotando. Si algo no cambió para mí desde que comenzó Sangre hasta que terminó, es que esa fue siempre mi escena preferida, gracias a esa maestra y su gran monólogo.

Aishh Sonia, a ti, ¿qué decirte? Te he ido descubriendo con el paso del tiempo, conociéndote y cogiéndote un montón de cariño, eres súper especial y, en parte, creo que si el grupo sigue adelante, es porque tú tiras de él, aunque eso ya te lo he dicho en alguna ocasión. Admiro a la actriz y a la persona que te conforman, eres grandísima.

A la primera Clara del Monte Carrasco, por ese gran papel que interpretaba, por vivirlo a tope y por hacerlo genial.

Ali, espero que te esté yendo genial en Polonia; por tus fotos veo que estás disfrutando y haciendo teatro, que es lo que a ti te gusta. Así que disfruta, haz mil y un papel y, recuerda que, cuando vuelvas, aquí estaremos esperándote.

Ese torturador... al principio tan misterioso y luego tan revelador. Ese chico joven que ha aceptado trabajar de torturador aunque no lo comprende y que echa la culpa de todos los problemas a los americanos. Es alguien más suelto por el mundo, que sólo necesita de alguien que lo escuche, alguien con quien hablar y que lo comprenda.

Yeraaay, mi Fifi precioso. Conocerte ha sido indescriptible, y ver cómo ibas progresando y metiéndote cada vez más en tu personaje ha sido también algo grandioso. Eres un gran torturador, un gran chico, un gran actor, un fenómeno de peluquero y, estoy segura de que, si te lo propones, en un futuro un gran cantante, de esos famosos y todo jeje. Sólo es cuestión de proponértelo y cumplirlo.

A mi segunda compañera de escena, la siguiente señorita Ramírez que llegó a escena seduciendo al profesor con un par de buenas razones... Gracias por ayudarme con el tema de la gata ¿eh? Siento que el profesor te echara la culpa al final a ti, pero claro, te pones ahí a... Ponerle los guantes, y claro, pasa lo que pasa.

Fue una verdadera sorpresa (grata, por supuesto) llegar a compartir escena contigo Ángela, conocerte mejor y descubrir por un lado a esa gran actriz capaz de seducir a un viejo y plasta profesor borracho, y por otro lado a esa persona profunda, con la que me encanta tener conversaciones, pues me enseña muchas lecciones de la vida. Espero poder seguir conociéndote.

También nuestra segunda galerista, esa que se meaba vistosamente y se frustraba con sus intentos fallidos de pipí. Con su ruptura de aguas espectacular en un ensayo y su gran e inolvidable interpretación. El papel de Clara no es algo fácil y usted lo ha clavado. En lo que a usted respecta, sólo me queda finalizar con un ''amén a eso, padre''.

Nuestro fantástico director, Goyo Bonilla, mejor conocido por Goya Molina. Se ve que en algún momento de Sangre cambió de sexo, de nombre y de apellido y no se le ocurrió avisarnos jeje... A este gran profesor y amigo, ¿qué decirte? Que gracias, por este año, por todo lo que nos has enseñado y por lo que aún te queda por enseñarnos. Tienes una mente llena con miles de cosas que nos vas mostrando, y no hay palabras para describir lo increíble que eso me resulta.

Gracias Goyo, por ser tan grande, por tus círculos de energía y por cada momento vivido. No olvides nunca lo grande que eres.

Nuestra técnica y en ocasiones limpiadora, una tía tan grande como ella sola. La verdad es que no recuerdo la primera vez que te vi en los ensayos, pero sí me acuerdo perfectamente del estreno en el paraninfo, cuando fuiste a vernos a los camerinos recién salida del hospital, eso vale mucho, pero no vale más que tú. Sepa usted que conocerla ha sido un gran placer, irte descubriendo a lo largo del año toda una aventura, y que sepas además que siempre te llevo conmigo. Gracias por todo lo que haces por nosotros y por mí, hace tiempo que dejaste de ser sólo nuestra técnico para pasar a ser una más. Por último, decirte que seguiré gritándole al amor, así que ya saben... a resignarse, aunque sé que en el fondo les encanta que grite jiji.

(A quien se esté pegando el tostón de leer todo esto gracias y ánimo, que ya falta poquito jeje. Me falta escribir solamente de dos personitas más).

Nuestra fabulosa y ''fantasticosa'' community manager, la señorita García, encargándose de que todo el mundo se entere de que existimos, mientras en ocasiones nos maquilla y nos lleva a los sitios. Gara, también ha sido un verdadero placer conocerte este año, aunque sigo pensando que cuando te enfadas me das miedo (pero el respeto es bonito, ¿eh?). Al igual que sucede en el caso de Nai, tú hace tiempo que dejaste de ser un anexo al grupo de Apeiron, tú ya eres una más, una de nosotros, y muy grande además. Has demostrado que eres claramente una de esas personas que consigue siempre lograr todo lo que se propone.

PD: Fui muy feliz el día que me dijiste por primera vez que me habías oído.

Como no, no podía escribir esto sin dar las gracias a mi fan particular, esa chica guapa que ha estado en más de la mitad de las actuaciones. Mi prima Miriam, la pequeña, esa que estuvo en la primera y en la última. Gracias por apoyarme en esto y en todo lo que hago y por seguirme a todos lados. No olvides nunca que eres enorme y que yo siempre voy a estar aquí para cuidarte... Y si no estará tu primo para traerte un vaso de agua jaja

Y bueno, hasta aquí puedo leer, falta nombrar a muchas más personas que rodean a Apeiron, pero si me pongo a nombrarlos uno a uno no acabo. Especial mención a un Ale por llevar el ascensor a todos lados, prestándonos incluso su coche, a Vane por seguirnos a todos lados, por ser una gran fan y por tirarnos cosas, a Sari, por ser otra fan mía particular y escaparse a verme siempre que puede, sorprendiéndome y haciendo que actúe con más ganas, a mi primo Ale, por ir a vernos actuar también en numerosas ocasiones y por echarnos un cable en las del tranvía, en las que un alumno indignado mandaba a la gente al fondo del pasillo al aula de disección mientras intentaba estudiar. Y también, como no, a mi prima Cris, nuestra fan canariona que se escapaba cada vez que podía para venir a vernos.

¡Anda! ¡Pero si faltaba nombrar a una personaje! La señorita Basquiat... Rocía Basquiat dicen por ahí que se llamaba. Una alumna que tuvo el pelo de diferente forma y color en cada una de las actuaciones y a la cual he visto progresar desde más cerca. Conocer a la señorita Basquiat me permitió también conocerme un poco mejor a mí misma, y llegar a ver lo cruel que puede llegar a ser una persona. Por todo ello, le doy las gracias también a la señorita Basquiat por aparecer y cambiar mi vida.

Y bueno, hasta aquí hemos llegado, tras momentos buenos y malos y tras recorrer la isla con nueve actuaciones, no se podrá decir que no corrió la sangre, pues si llega a correr un poquito más esa sangre tan dulce estoy segura de que hubiéramos quedado desangrados.

Sangre se lleva un pedacito de cada uno de nosotros y, a su vez, todos nosotros nos llevamos un pedacito de sangre, miles de recuerdos y sonrisas.

Pero bueno, como bien dice el título de esta entrada ''No es un adiós, es el comienzo de algo nuevo'' porque es hora de pasar la fregona para limpiar la sangre y revolver entre cientos de papeles en la búsqueda de una nueva obra.

No olvidaré jamás Sangre, lo sé. Por todo lo que significó y por lo que significa. Porque fue mi primera obra, la primera vez que subía a un escenario, porque aprendí mucho, de todos ustedes y de mí misma, porque sé que una parte de mí jamás volverá a ser la misma y porque a cada uno de ustedes lo quiero de una forma especial y única que no sería capaz de describir con palabras.

¡¡¡¡¡GRACIAS!!!!!

Lidia... esa pobre niña con la cabeza espachurrada, ella no sobrevivió.