Un acto espontáneo de amor

Hubo una vez, una película que marcó un antes y un después en la vida de muchas personas. Sí, me refiero a Maktub, esa película que habla de ese chico que significó tanto para todos nosotros y que nos dio tantas lecciones antes de ir a reunirse con "el jefe".

En esa película, uno de los mensajes importantes que se reflejan es que no hay mejor forma de demostrar lo que sentimos que con un acto espontáneo de amor, y hoy, día oficial del amor y los enamorados, yo he encontrado un acto de amor que me ha llegado hasta el alma, me ha conmovido y me ha hecho llorar.

He encontrado el regalo de San Valentín más grande que se puede hacer; una persona que regala vida a otra desinteresadamente y, como se trata de un primo mío hacia una de las mujeres más grandes que conozco, pues más feliz me ha hecho.

ESTO señoras y señores, es un verdadero acto de amor. Esta es la clase de cosas que te hace creer en que esta humanidad aún tiene corazón y en que hay personas dispuestas a regalar un pedacito de sí mismas con tal de ayudar a otras.

El día de San Valentín no es el día del amor, es simplemente un día más para celebrar el amor, ya que si quieres a alguien lo demuestras todo el año y no sólo un día, en eso estoy de acuerdo. Pero esto, ese mensaje y esa foto me han sacado una sonrisa y un montón de lágrimas, de emoción, porque es una de esas imágenes que lo dicen todo.

Me he levantado sólo ha escribir esto, mi gripe me pide que vuelva a mi cama un rato, pero me sentí en la necesidad de escribir esto y de compartirlo con ustedes.

Miguel Peraza, ya ni sé qué decirte, tu felicidad y tu vitalidad rozan lo imposible, y cuando creo que no puedes ser mejor persona de lo que ya eres, encuentro estas cosas y no puedo más que emocionarme. Eres grandísimo primo, no lo olvides.

Ángela Cala, sigue luchando, que todos los que te queremos luchamos contigo, desde que se me cure la gripe te iré a ver.