¡Oh señor insomnio! Ya decía yo que hacía tiempo que no pasaba por mi vida, y aquí está, cumpliendo con su rutina, apareciendo en mi vida con una maletita llena de un poco agradable dolor de cabeza...
¿Dormir? ¿Qué era eso? Tengo algunos lejanos recuerdos de lo que era esa sensación, aunque sí creo recordar que era algo que antes solía hacer con bastante frecuencia y que me encantaba, pero no, ahora el insomnio decide que las noches las pase con los ojos abiertos y mirando las musarañas.
Han pasado tantas cosas...
Como ya saben todos/as los que me conocen de verdad, a pesar de que por norma general no suelo hablar mucho en persona, por aquí podría pasarme horas y horas escribiendo páginas y páginas, contando mil y una cosas (por algo llevo el nombre de la princesa de las mil y una noches) pero hoy no se dará ese caso, pues mi insomnio, mi dolor de cabeza y yo vamos a meternos los tres juntos en la cama y así, aunque no podamos dormir, al menos nos haremos compañía los unos a los otros.
PD: Nada, a cualquiera que se le ocurra la brillante idea de leer esto, no me lo tengan muy en cuenta, normalmente se me va mucho la pinza y es notable que en estos párrafos se me va aún más, pero cabe destacar también el detalle de que todo esto sin sentido que estoy escribiendo lo pongo a las 3:06 por lo que mi cabeza ya no coordina tan bien como debería (eso teniendo en cuenta que mi cabeza por lo general no suele funcionar demasiado bien jajaja).
Pues eso, que buenas noches o buenos días a quien esté leyendo esto y, una vez más, pido que no presten demasiada atención a estos párrafos, que a estas horas es lo más razonable que sale de estas teclas.
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